Esta rebaja, de la que se hacen eco varios medios de comunicación españoles, se anunció en octubre y se incluyó en los Presupuestos del Estado para este año del Gobierno presidido por el socialista Antònio Costa.
Cuando se aplique va beneficiará a 3,1 millones de consumidores de electricidad -el 45% de los contratos- y a 1,4 millones de clientes de gas natural – el 92% del total-.
Para justificar esta bajada, el Gobierno de Portugal indica en el informe presentado ante la Unión Europea que esta medida tiene como objetivos “reducir los costes asociados al consumo de energía” y proteger a los consumidores “sin afectar a la recaudación por IVA”: según los estudios oficiales apenas bajará unos 37 millones de euros.