El Fondo Monetario Internacional (FMI), un organismo cuyos tres últimos directores- Rodrigo Rato, Dominique Strauss-Kahn y la actual responsable, Christine Lagarde- han sido procesados por la comisión de diferentes delitos, recomienda al Gobierno español que suba el IVA-que ya ha subido pese a la promesa electoral de no hacerlo-, exactamente que suba los tipos inferiores del IVA, es decir el reducido, que es del 10%, y se aplica a algunos productos alimenticios y a los productos sanitarios, transporte de viajeros, la mayoría de servicios de hostelería y la construcción de nuevas viviendas y superreducido, del 4%, que se aplica a artículos de primera necesidad, como el pan, la leche, las frutas y las verduras; así como a los medicamentos.
Ese aumento serviría para recaudar 20.000 millones de euros más que el Fondo Monetario-cuyas recomendaciones no han sido nunca útiles para afrontar la crisis- para recortar el déficit, algo que recomienda la UE. Además, el Fondo Monetario pide que se acabe con la mayoría de deducciones, exenciones e incentivos fiscales.
Por si esto no fuese suficiente, este organismo pide que se realice lo que llama ‘racionalización del gasto’, que pasa por aumentar los copagos en Educación y Sanidad.
No dice nada el FMI de mejorar la inspección fiscal, de manera que los grandes defraudadores, que son las empresas más importantes, no puedan seguir esquivando sus obligaciones fiscales; tampoco habla el FMI de aumentar los impuestos a las grandes fortunas y mucho menos de que la banca devuelva los más de 66.000 millones que le fueron prestados por el Estado, vía rescate por parte de la UE.
