Cristina de Borbón seguirá sentada en el banquillo de los acusados durante todo el juicio del ‘Caso Nóos’. El tribunal ha rechazado el planteamiento de su defensa, de la Abogacía del Estado y del Fiscal, quienes solicitaban que se le aplicara la conocida ‘Doctrina Botín’, de acuerdo con la cual no puede ser juzgado aquel contra el que dirija acusación únicamente la acusación popular.
Las magistradas que componen el Tribunal consideran, como el juez instructor de la causa, José Castro, que las acciones de la hermana del Rey no perjudican a la Agencia Tributaria, sino a todos los españoles que, con sus impuestos, contribuyen a sostener las arcas públicas. Ello supone que, en contra de lo que es su deber, ni la Fiscalía ni la Abogacía del Estado han obrado en defensa de los intereses de los ciudadanos, sino de los de la hermana de Felipe VI.
Hay que recordar que Cristina de Borbón está acusada de dos delitos fiscales en grado de cooperadora como copropietaria, al 50% de la empresa Aizoon con la que su marido, Iñaki Urdangarin, defraudó 337.000€ a la Hacienda Pública durante 2007 y 2008. Sin embargo, la cifra resultante del cálculo que realiza la Agencia Tributaria, distinto al que asumió el instructor, no alcanza el umbral del delito y, por tanto, Hacienda- que como la Fiscalía y la Abogacía del Estado depende jerárquicamente del Gobierno- no acusa a la ex duquesa de Palma.
