Parece ser que a la Iglesia le escandalizan más los desnudos que los casos de abusos sexuales a menores por parte de sacerdotes. O eso es lo que ha dejado entrever, al menos, un organismo como el cabildo de la Catedral de Santiago que, en este caso sí- no recordamos que hiciese lo mismo para condenar algunos de aquellos abusos-, se ha tomado la molestia de emitir un comunicado para tomar distancia con la exposición «O Poder»,de Ramón Conde, que estos días se puede ver en Praterías y que muestra esculturas humanas desnudas.
«Esta exposición no tiene nada que ver con nuestra Catedral», dice el cabildo que, asegura, ha recibido «reiteradas quejas» de vecinos y peregrinos, según señala en la nota. Además añade: «lamentamos que tal muestra hiera la sensibilidad de la gente que se acerca a la Catedral» y concluye lamentando que la libertad de expresión no haya respetado «determinadas normas» y un «sentido del pudor».