Agentes de la sección especializada en desaparecidos de la Policía portuguesa trabajan desde primera hora de la mañana de este lunes en una zona próxima al lugar donde desapareció Madeleine McCann en 2007. Según ha sabido vigoalminuto, se ha acordonado una zona del tamaño de tres campos de fútbol a apenas 300 metros del lugar en el que se vio por última vez a la pequeña, en una zona de matrorrales. La misma está delimitada y se impide el paso a cualquier persona ajena a la investigación.
Los agentes están estudiando irregularidades en el terreno y, según ha podido saber esta redacción, se han mandado traer perros rastreadores y radares de penetración terrestre además de haberse avisado a un equipo de excavación.
Es en este lugar donde, según las nuevas pistas incorporadas a la investigación, la noche de la desaparición de Madeleine fue visto un hombre llevando a un niño o una niña en brazos.
