Esperanza Aguirre, ha criticado este viernes que los agentes de la Policía Local de Madrid que la multaron este jueves por parar en un carril bus acudieran a comisaría junto a la prensa y a su sindicato, y ha dudado que “si una persona tiene un ataque de ansiedad por poner una multa a una señora, aunque sea famosa, esté capacitado para ser agente de movilidad”.
En declaraciones a varios medios, la ex presidenta de la Comunidad de Madrid, ha reconocido que hizo mal y que cometió una infracción al parar su coche en un carril bus para sacar dinero de un cajero, lamentó no haber pagado la multa allí mismo, “porque los 200 € se hubiesen quedado en 100” y confesó que esa misma tarde la robaron la cartera, “ayer fue un mal día”.
Eso sí, Esperanza Aguirre- de la que se han hecho centenares de bromas en Twitter en #Aguirrealafuga– ha reiterado que estuvo “15 o 20 minutos” mientras le ponían la multa y que para nada se dio a la fuga, sino que multa estaba ya puesta y el agente le pidió que se quedara para darle una copia por si quería recurrirla. Ella le respondió que no pensaba recurrir, sino pagarla, y se marchó, “no me interesaba y cualquiera sabe lo que iba a tardar en escribir la copia”.
Además de ello ha negado que se llevase por delante la moto del agente que, ha indicado “estaba fatal aparcada” y que únicamente la rozó como puede comprobarse en la marca que hay en su coche “que es como el de una uña…decir que he arrollado a alguien es el colmo”.
Aguirre ha adelantado que sus abogados estudiarán la denuncia que se ha presentado contra ella por desacato a la autoridad, y ha atribuido la relevancia que se está dando al caso a que ella es una persona famosa. En su opinión, este asunto “es ‘bocato di cardinale'” y demuestra que todo el mundo “es igual ante la ley pero no ante los medios de comunicación”.