En 2006 la región italiana de Véneto aprobó convocar una referéndum para que sus ciudadanos decidiesen si querían independizarse del resto del país, decisión que se materializará desde este domingo, día 16, y hasta el próximo 21.
Entonces, la iniciativa para que seis provincias – entre ellas Padua y Verona, además de la propia Venecia- se inspiró en el ejemplo de Escocia, cuyos ciudadanos podrán decidir el próximo 18 de septiembre si siguen siendo súbditos de Su Graciosa Majestad.
Los ciudadanos de Véneto, además, tendrán que decidir si quieren seguir dentro de la Unión Europea y la OTAN, algo que rechazan quienes piden la independencia, “los venecianos no solo quieren estar afuera de Italia, sino también de la UE y la OTAN”, dicen los dirigentes de las opciones políticas que proclaman la independencia.
Aunque los ciudadanos votarán, la decisión que salga del referéndum no es de obligado cumplimiento para la República Italiana…pero sí darían la razón en algo a los partidos separatistas: su rechazo a seguir soportando las altísimas cargas fiscales del Estado a causa de las cueles esta región aporta anualmente al mismo 20.000 millones de euros más de los que recibe de los presupuestos generales italianos.
