El alcalde de Santiago, Ángel Currás, que sigue estando imputado en la Operación Pokemon por presunto tráfico de influencias, quiso hoy pedir disculpas a los compostelanos por la imagen que está dando el Concello que dirige.
Currás, en sus primeras declaraciones tras los últimos arrestos dentro de la presunta trama a de corrupción, admitió que la proyección de los últimos tiempos del Ayuntamiento de Santiago no es la más óptima, pero pidió a sus conciudadanos que esperen los tiempos de la Justicia tanto de la Operación Pokemon como de la Operación Manga -que es como se ha denominado la segunda fase de la investigación-.
También aprovechó el regidor santiagués para afirmar que se sigue sintiendo respaldado por el PPyG y que no piensa dejar la Alcaldía.
No obstante, el propio presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ayer admitió que lo que estaba ocurriendo en el Concello de Santigo no era «normal».
Por cierto que este viernes hemos sabido también que el alcalde de Santiago asumirá las competencias que, hasta ayer mismo ejercía, el concejal de Seguridad, Albino Vázquez, detenido en esta segunda fase de la Operación Manga.
