Eso sí, confía en que la economía española pueda mejorar a partir del segundo semestre, gracias a la “corrección del rumbo y a los sacrificios que están asumiendo los españoles”. Así lo que ha asegurado el presidente del Gobierno durante la rueda de prensa en la que ha hecho balance de su primer año en La Moncloa, una comparecencia en la que, aseguró que es necesario, “no engañarse ni engañar a los ciudadanos”, lo que le dio pie a adelantar que la economía española seguirá en “recesión durante algún tiempo”.
Para Rajoy, las reformas que ha puesto en marcha el Gobierno “están empezando a dar algunos frutos”, entre los cuales citó la corrección del déficit público, la mejora de la balanza por cuenta corriente y la menor destrucción del empleo privado, así como el reconocimiento por parte de los socios europeos y de los mercados internacionales del esfuerzo que está haciendo España.
“Austeridad y reformas son los dos ingredientes de una política cuyo único objetivo es que se puede crecer para crear empleo cuanto antes, sabemos que no se producen efectos instantáneos, sabemos que mucha gente está impaciente, son ya cinco años de crisis, mucha gente se está dejando llevar por el escepticismo cuando no por la desesperanza y mucha gente se siente decepcionada por la falta de resultados”, recalcó el presidente.
