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¿Se fue de la lengua el ministro del Interior?

A esta pregunta tratará de dar respuesta la Audiencia Nacional, ya que tiene dudas sobre si en la rueda de prensa ofrecida hace semanas por parte del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, éste pudo revelar algún que otro secreto de sumario sobre el secuestro y asesinato del empresario Publio Cordón.

Y para saberlo, el juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermúdez ha requerido una serie de informaciones adicionales con el fin de determinar si existe base para estimar si se cometió o no un delito de revelación de secretos.

Aunque no se cita expresamente al ministro, sin duda, se refiere a él, ya que fue él quien, en una rueda de prensa que ofreció en el Congreso el pasado 19 de julio detalló algunos datos que no habían trascendidos. De hecho, supimos que Cordón murió tan sólo 15 días después del inicio de su secuestro.

El órgano judicial competente para investigarle, en caso de que el juez concluya que los indicios de la revelación de secretos son firmes, sería el Tribunal Supremo.

Serán el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, y el general jefe del Servicio de Información de la Guardia Civil, Faustino Álvarez Sola, los que tengan que decir al juez quienes le dieron información verbal o escrita del resultado de las investigaciones.

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