Las llamas no dan tregua en O Barco de Valdeorras (Ourense) y controlarlas sigue siendo un trabajo complicado. Los últimos datos confirmados por la Xunta elevan a 1.200 las hectáreas arrasadas y los vecinos de A Veiga de Cascallar continúan desalojados por la cercanía del #incendiovaldeorras a sus casas.
La intensidad y los cambios constantes de la dirección del viento están dificultando mucho que los efectivos por tierra y aires desplegados en la zona se hagan con este gran incendio, el más cuantioso de los registrados en Galicia en lo que va de verano. Según detalla la Consellería do Medio Rural e Mariño, esas rachas fuertes de viento están provocando un cambio constante en la estrategia para controlar su perímetro.
Mucho nos tememos que esas 1.200 hectáreas se convertirán en bastantes más, ya que las llamas avanzan totalmente descontroladas. Lo mismo opinan desde distintas plataformas ecologistas como Verdegaia o la Plataforma para a Defensa das Fragas do Eume, entre otras, que además denuncian la «inoperancia» de la Xunta para prever y extinguir incendios forestales que se están arrasando nuestra comunidad.
A estas horas se siguen empleando a fondo dos técnicos, nueve agentes forestales, 27 brigadas, 12 motobombas, una pala, seis helicópteros, 11 aviones y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
Ya se han cumplido más de 24 horas del inicio de este incendio en la parroquia de Santigoso.
