Las felicitaciones a la plantilla del Celta por conseguir este domingo un merecido ascenso a la Primera División no paran de llegar. Entre ellas, la del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que como vigués de adopción sintió con gran orgullo la despedida de la Segunda División después de 5 años duros ,deportivamente hablando.
Pero la recepción del jefe del Ejecutivo gallego en la Praza do Obradoiro no fue la única, ya que el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, hizo lo mismo, pero éste acompañado por unos 1.600 niños de las Escuelas Deportivas de titularidad provincial.