Funcionan al 100% las de urgencias, las del 061 y de diálisis, pero todos las demás vehículos están en los garajes. La huelga del personal de ambulancias de Marín, Baiona, Foz, Ponteareas y Vigo tenía un seguimiento, a primera hora de la mañana de este jueves, del 100%, según han indicado los sindicatos. Desde ellos se ha advertido que no se cumplirán la totalidad de los servicios mínimos fijados por Sanidade por considerarlos abusivos, aunque se garantiza “que no se perjudicará a ningún ciudadano que necesite este servicio, de manera que estarán paralizados los que no funcionan los festivos, como los de fisioterapia o los traslados”. Además, aunque sólo trabajarán alrededor de una decena de personas de las 54 de plantilla del área de Vigo, “los trabajadores estarán localizados en todo momento por si es necesario”.
La intención del paro es evitar el “desmantelamiento” del servicio que quiere llevar a cabo la Xunta “no pedimos un aumento de salario ni mejoras laborales”, aclaran los trabajadores, sino que se sepa que ya se han sacado de la calle 5 ambulancias, “y sabemos que habrá un recorte cercano al 40% en los meses que vienen”.
Para empezar, Marín se queda, desde este sábado, día 10,sin el servicio nocturno de ambulancias, que pasa a ser asumido por las dos que hay en Pontevedra, aunque sí se mantiene el de Baiona, por tratarse de una zona de ocio. Las otras tres se pierden en al área viguesa, algo que hace aún más deficitario este servicio. Los sindicatos advierten que la Organización Mundial de la Salud (OMS) requiere una ambulancia de Soporte Vital Básico por cada 25.000 habitantes, “Vigo sólo tiene una por cada 49.521 personas, la mitad de lo aconsejado, y Pontevedra una por cada 62.000”.
