Así se puede constatar en las clasificaciones históricas del club celeste. En ninguna de las campañas recientes en las que regresó a Primera División cedió hasta el final teniendo ese número de puntos, victorias en casa y goles a favor. Sucedió en la temporada 1975-76, cuando acabó segundo en la Liga de Segunda División, volvió a suceder en 1981-82, cuando se clasificó primero, diez años después, cuando acabó en el mismo puesto y en la temporada 2005-05, año en el que quedó subcampeón en la categoría de plata del fútbol español.
En todos estos casos, a esta altura de temporada, el Real Club Celta o mandaba en la tabla o estaba en el segundo puesto. Además, había perdido, en el peor de los casos, tres partidos en casa y sumaba, en todos los casos, menos uno, menos goles a favor que los que tiene en la actualidad. El Celta, que tras su victoria in extremis de ayer, jornada 25, ante el Tenerife y el tropiezo del Rayo Vallecano, lidera la Liga de Segunda División, suma 51 puntos, sólo ha perdido un encuentro en Balaídos, ha metido un total de 46 goles y únicamente ha encajado 20, la segunda mejor estadística de todos sus ascensos desde hace 35 años.
