Cien días para las municipales y el PP ha comenzado a hacer los deberes en el arranque de su convención anual en Santiago de Compostela, donde han querido dar a entender que debate y política no están reñidos con la diversión. Para ello, salones con Wii con populares jugando; Porro, Rueda y Cospedal jugando al futbolín; aulas de formación; gradas para ‘espiar’ las reuniones de los políticos; bicis para hacer spining… y secretos, muchos secretos personales durante los discursos, como la nueva perra que duerme en la casa del presidente de la Xunta en Monte Pío, Candela, regalada por el alcalde de Lousame y nacida el mismo 1-M que los populares ganaron las elecciones autonómicas
En total, 1.400 militantes y simpatizantes acreditados para ver a la cúpula del PP, con su presidente al frente, que aprovechó la ocasión para mostrar su oposición a la nacionalización de las cajas gallegas y a la política ‘errática’ de Zapatero en materia económica, financiera y laboral. Para Rajoy, la nueva reforma tras la fusión de las cajas puede poner en peligro la estabilidad de Novacaixagalicia.
Además, durante su discurso, el presidente popular dio varios consejos a Zapatero para una gestión que espera que acabe con las próximas elecciones generales, como aseguran en este momento todas las encuestas. Lo que no le perdona, asegura, es que no haya visitado Galicia durante el año Xacobeo.