Las autoridades aún están intentando averiguar qué pasó realmente. Llamados a acudir al hospital Elisabethenkrankenhaus, en Lörrach, al sur de Alemania, por una explosión y un piso cercano en llamas con varias personas dentro, cuando llegaron al incendio en medio del caos del humo y el fuego tuvieron tuvieron que echar cuerpo a tierra porque se vieron involucrados en medio de un tiroteo.
Una mujer, de la que no ha trascendido ni identidad ni edad, salió corriendo con un arma en la mano y se puso a disparar de forma indiscriminada con el hospital lleno de visitas. La policía abrió fuego y en el intento por reducirla falleció. En total ha habido cuatro víctimas mortales, una de ella la propia autora del tiroteo, y un agente gravemente herido.
Además de la autora, se ha encontrado una víctima mortal en el hospital y otras dos en la vivienda, una mujer y un niño. No se ha confirmado que el incendio esté relacionado con los disparos.
