La jueza Virginia Phillips, de California, anuló hoy la norma ’Don’t ask, don´t tell’ , aprobada hace 17 años y que permitía a gays y lesbianas acceder al Ejñercito de los Estados Unidos siempre que no hablasen de su orientación sexual. En una sentencia de más de 80 páginas, que de hecho declara la inconstitucionalidad de prohibir a los homosexuales servir en las fuerzas armadas, Phillips, dio la razón a Log Cabin Republicans, una organización conservadora que defiende los derechos de aquellos.
La jueza señala que esta norma ataca la primera y la quinta enmienda de la Constitución estadounidense y restringe los derechos fundamentales de los homosexuales; pero la magistrada federal va más allá y asegura que la norma ’Don’t ask, don´t tell’ ataca a la preparación del Ejército y tiene “un efecto pernicioso” en las fuerzas armadas de los Estados Unidos.
