Se acabaron las corridas de toros en Cataluña a partir de 2012. La proposición hecha por la plataforma Prou! ha salido adelante a pesar de la divergencia de opiniones incluso dentro de un mismo partido, ya que mientras 32 diputados de CiU votaban a favor de la prohibición, 7 lo hacían en contra. Lo mismo ocurría dentro del PSC, un partido protaurino en el que 3 diputados han votado a favor de prohibir las corridas y otros 3 han optado por la absternción. En total, 68 votos a favor, 55 en contra (también con los votos de PP y Grupo Mixto) y 9 abstenciones.
La mañana ha acabado con lábrimas: de alegría por parte de los abolicionistas, que ocupaban la tribuna y que celebraron en los pasillos del Parlamento catalán un veto histórico; de tristeza por parte de los amantes del toreo, con pancartas en la entrada principal.
