El Liceo Marítimo de Bouzas acogió una conferencia sobre salvamento marítimo que contó con la presencia de José María Suárez Llanos, jefe de este servicio en Vigo, Álvaro Espejo, piloto del ‘Pesca 1’, y Javier Losada, un experto rescatador.
Más de cien personas llenaron el auditorio de la entidad viguesa en la primera conferencia de la temporada. Los tres mostraron la forma en que realizan su “arriesgado” trabajo, descubrieron algunas de las facetas más inéditas, divulgaron vídeos de sus operaciones más importantes y respondieron a las preguntas de los asistentes durante un acto contó con la colaboración de Ora, Nauticarea, Tierra y Mar y Balteos Náutic.
“Son especialistas que arriesgan sus vidas por los demás”. Así se definen los integrantes de Salvamento Marítimo y quedó demostrado durante las más de dos horas en las que insistieron una y otra vez que lo más importante era la prevención, asegurando que “casi el 60% de los accidentes en el mar se producen en embarcaciones a vela y barcos de recreo”.
José María Álvarez Llanos insistió una y otra vez que “el mejor remedio es estar bien equipado, tener listos y preparados todos los sistemas de seguridad y también experiencia, además de atento a los partes metereológicos”.
El jefe de Salvamento Marítimo en Vigo señaló que “nuestra misión es rescatar personas”, y así lo han hecho en los últimos 25 años en los que han logrado recuperar a más de 1.500 que se encontraban en dificultades, además de realizar otro tipo de servicios, como controles de embarcaciones e incluso detectar manchas de contaminación en el mar, sin olvidar que Galicia cuenta en la actualidad con un servicio de rescate considerado como uno de los mejores del mundo.
Actualmente, en Galicia hay cinco helicópteros, algunos de ellos de última generación que, junto con la coordinación con los centros de salvamento en tierra, con otras administraciones y una rápida salida en caso de accidente son elementos vitales para tener éxito a la hora de socorrer a quienes están en peligro.
Por ello, tras recibir una alerta, el helicóptero puede estar volando en menos de 20 minutos y, si es necesario, puede llegar a estar tres horas en el aire. Álvaro Espejo, piloto de uno de ellos, desveló las “complicadas condiciones” en las que suele realizar su trabajo, “depende de muchos factores, sobre todo el viento y la gravedad del accidente”, dijo. Espejo desveló que uno de los aparatos dispone de unos flotadores para aterrizar en el agua en caso de emergencia, pero no garantiza la flotabilidad el mismo.
Javier Losada se encarga de bajar con un cable hasta la persona que va a ser rescatada. Insistió en que “en toda la maniobra es importante que los accidentado sigan las instrucciones”.
