El primer ministro polaco, el conservador Donald Tusk, ha sido elegido como el presidente de Consejo Europeo por los jefe de Estado de los 28. En el cargo de Alta Representante de la UE para la Política Exterior se ha designado a la ministra italiana, la socialista Federica Mogherini.
Tusk sucederá a Van Rompuy, cuyo mandato finaliza el 30 de noviembre. A principios del mismo mes, Mogherini asumirá el puesto de Catherine Ashton. El actual presidente del Consejo Europeo, Van Rompuy, ha indicado que ambos líderes deben trabajar en tres retos destacados: “el estancamiento de la economía; Ucrania y Rusia, la amenaza más grave a la seguridad continental desde la guerra fría; y en tercer lugar el lugar de Reino Unido en la UE“.
En relación a a la crisis en Ucrania, “es una gran oportunidad de introducir la energía del centro y el este de Europa“, expuso el futuro presidente del Consejo Europeo, añadiendo que “existía el riesgo de que esta región ambiciosa y próspera fuera ignorada” en el reparto de los cargos de la Unión Europea.
