Durante la jornada de hoy, la región ucraniana de Crimea decide su separación de la antigua república soviética o la adhesión al país ruso. La consulta a la ciudadanía fue declarada ilegal ayer por Ucrania que cuenta con el apoyo de Occidente.
El resultado del plebiscito se espera que sea favorable a la separación de Ucrania, pues un 60% de la población de la zona es de nacionalidad rusa. Los centros de votación permanecerán en activo doce horas, desde las 8:00 horas (7:00 hora peninsular española), los resultados provisionales se difundirán a última hora del día. Las cifras definitivas no se darán a conocerán hasta un día o dos más tarde.
De ser positiva la anexión al país ruso, éste recibiría crecientes sanciones económicas por parte de Estados Unidos y la UE. Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha desplegado una estrategia militar agresiva con las actuales autoridades de Ucrania. El eurodiputado húngaro, Béla Kovács, comunicó que “este referéndum es absolutamente legal. Existe una noción que es democracia y la gente tiene el derecho a determinar su propio futuro“.
El ansia de cambio se ha propagado a otras ciudades ucranianas que reclaman modificaciones en la estructura territorial del Estado. En Lugansk, al este de Ucrania, un grupo de activistas realizaron una manifestación solicitando la federalización del país. El acto que reunió a 300 personas aproximadamente, fue anulado por la prohibición de organizar eventos públicos hasta el 30 de marzo.
Entrada la tarde, el Ministro de Defensa ucraniano, Ihor Teniuj, anuncia un acuerdo de tregua con Rusia que se compromete a no atacar las instalaciones militares en Crimea hasta el 21 de marzo.
