Así lo asegura, ni menos, que en portada. En la edición digital del prestigioso rotativo, su editor asociado, Jeremy Warner hace un análisis de la situación económica de España y concluye que el país “es oficialmente, insolvente”. Warner, que basa su artículo en el informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), publicado el mes pasado, señala que “lo más recomendable es sacar el dinero mientras se pueda”.
El periodista llega a esta conclusión subrayando que, de acuerdo con los datos del FMI, la “reestructuración de la deuda en España es inevitable”, al tiempo que incide en que Europa, que ya aseguró que Grecia sería el primer y último país que sufriría una reestructuración financiera, y que luego tuvo que afrontar en Chipre una situación similar, es a quien esperan los españoles para que les saque las castañas del fuego. Ello es así, en su opinión, porque “España está retrasando una recapitalización mayor de sus bancos a la espera de que se complete la unión bancaria europea, esperando que haga el trabajo en su lugar”.
Para Warner, el Fondo Monetario es una institución “demasiado diplomática y por ello no ha calificado a España de insolvente”, pero que la realidad es que, de acuerdo con sus previsiones, “siendo realistas y huyendo del su habitual optimismo” sitúan al país en este punto.
No se acaban ahí las apreciaciones de The Telegraph, que muestra su seguridad de que “los acreedores bancarios serán ampliamente rescatados y que, en vista de ello, la confiscación de sus depósitos parece muy posible”.
“No aconsejo sacar el dinero a la ligera. De hecho, un consejo de este tipo suele ser considerado irresponsable, ya que corre el riesgo de inducir al pánico, pero mirando a las proyecciones del FMI resulta la única decisión racional”, concluye Jeremy Warner que, sin embargo, excluye de esas advertencias a la división británica del Banco Santander, “puesto que está completamente al margen de la ‘nave nodriza’, en España”.
