Si ayer informamos que IKEA había retirado de todas sus tiendas en Europa, entre ellas, la de España, su albóndigas después de que las autoridades sanitarias checas hallaran trazas de carne de caballo en niveles hasta el 10%%, hoy la multinacional sigue reaccionado a este escándalo que le está afectando de lleno.
Este miércoles la cadena sueca anuncia que dejará de ofrecer a sus clientes, por el momento y en todas sus tiendas de Europa, otros preparados cárnicos suministrados por Dafgård, el mismo productor de las albóndigas. Entre estos, las salchichas de Viena que llevan sus famosos perritos calientes y que que se comercializan en España, Francia, Gran Bretaña, Irlanda y Portugal.
En el caso de Suecia la retirada momentánea afecta a los preparados sus hamburguesa con guarnición y al pudin de repollo.
También hemos conocido hoy que IKEA cambiará de proveedor cárnico en Europa. Y es que, sólo durante el año pasado, la compañía facturó 1.300 millones de euros en sus restaurantes, lo que supone el 5% de sus ingresos.
